Lengua de Señas "Un Todo" (1)

La Lengua de señas se constituye como un sistema complejo y natural de la persona sorda, que ádemas de permitirle comunicarse se establece como todo un sistema que le permite, al igual que para el oyente es el español, desarrollar al maximo las potencialidades del niño sordo.

Cuenta con características, al igual que las lenguas orales, de aspectos pragmáticos, semánticos, lingüísticos, paralingüísticos y sintácticos.

La lengua de señas cuenta con características propias en la configuración de las señas, para así expresar determinadas situaciones:

1. Parámetros Formativos

• Queirema: Forma, la configuración de se le da a la mano, por ejemplo: un dedo extendido y los demas flexionados.




• Toponemas: Hace referencia al lugar donde se realiza la articulación
  1 al 7: Espacio neutro
  
  
  8 al 19: Cabeza
  
  
  20 al 22: Brazo izquierdo
  
  
  23 al 25: Brazo derecho
  
  
  La articulación se realiza ateniéndose a estos toponemas, dento de estas áreas espaciales.
  
• Kinemas: Corresponde al movimiento que se realiza con la mano

• Kineprosemas: Dirección que tiene el movimiento de la mano.

• Queirotropemas: Hacer referencia a la orientacion de la palma de la mano.
  

• Prosoponemas: La expresión de la cara cumple una función expresica, y es importante en la producción y correcta comprensión de la Lengua de señas.

Todos estos componentes, se unen para dar forma a los signos. Al igual que en el español se combinan los fonemas, en la Lengua de Señas se combinan los parámetros.

Cuenta con caracteristicas lingüísticas propias, la sintaxis se configura ordenando de forma cronológica las señas, tal como se presentan los acontecimientos.

La conciencia fonológica de los sordos seria el conocimiento de la identidad morfosintáctica de las señas, de la configuración de la mano, del movimiento y de la posición en el espacio, así como para los oyentes es la identificación de las palabras, las silabas, los fonemas, entre otros elementos.

(1) Lou, Maria; Jimenez, Armando. Logopedia. Ambitos de Intervención. Cap V pag. 81 a 105. Ed. Aljibe